Viernes 29 de Julio de 2022, día 3.

1.000 kg de hierros.

He dormido estupendamente, pero estoy un poco inquieto por el viaje, es muy largo, voy solo y la zona es bastante complicada... no estoy seguro de que pueda hacerlo entero, sobre todo Albania me tiene preocupado. Pero bueno si me agobio o lo que sea, pues media vuelta y ya.

Me distraigo un poco con unas gallinas súper graciosas que tienen. Son preciosas, parece que tengan un sobrerillo. Además son muy curiosas y hacen un ruido de cacareo muy simpático. También tienen una perra que ayer me dejó muy sorprendido porque al entrar a la casa no me echó cuentas ninguna, cuando normalmente un perro se pone en plan guarda... Pregunto y me me explican que ya informaron a la perra sobre mi llegada. Entonces ella está al tanto, da visto bueno y así yo tengo autorización.

La moto llegaba supuestamente anoche, pero al transportista se le hizo ayer tarde y me pidió servirla hoy; como voy bien de tiempo no hay problema, y además esta empresa es extremadamente seria, te puedes fiar completamente de lo que te digan. Entonces llega sobre las 8:30, pero me pilla dormido. Los dueños de la casa tienen el detallazo de recepcionarla y descargarla. Cuando bajo ya está todo preparado. La reviso y la dejo lista para subirla esta tarde al remolque, que va enganchado al coche que nos llevará a Zagreb, Croacia.

Me llego a un pequeño súper que hay en el pueblo y me compro un gazpacho y un tomate. Son las 12:30 y me preparo la comida... atún, que no me guta mucho... pero tengo que empezar bien, que luego no como nada...

Luego con mucho calor, cargamos las motos, cosa que nos lleva hora y media, porque hay que hacerlo súper bien, y salimos a las 16:45. Van 5 motos en total, llevamos 1.000 kilos de hierros, y a mi me asusta un poco tantísima carga.

Nos esperan 14 horas hasta Croacia, donde yo me bajo. Vamos tres, para conducir, es mejor turnarnos. Pero como yo estoy asustado y además me dan un poco de miedo los coches... y con tanto peso... no me atrevo a conducir. Es un coche del futuro, es automático, el volante va solo, los frenos son asistidos... un montón de cosas que interfieren... Mis anfitriiones son tan extremadamente amables que se pegan el enorme trabajo de llevar el coche ellos y a mi me da un poco de vergüenza ser un paquete... Por cierto conducen de maravilla y el coche es espectacular.

Carreteras, peajes, más carreteras, más peajes...